Lesly Estrada
Coordinadora de Emprendimiento
Cámara de Industria de Guatemala
lestrada@industriaguate.com
El Monitor Global de Emprendimiento para Guatemala, da cuenta que es mayor la cantidad de hombres que emprenden (5 de cada 10) que la cantidad de mujeres que optan por levantar un negocio (3 de cada 10).
Ante esta estadística, y tomando en cuenta la calidad y no la cantidad, el análisis se vuelve interesante. Según W Startup Community, Fundación que busca apoyar y desarrollar el emprendimiento femenino tecnológico en España, el 56% de emprendimientos liderados por hombres se cierran en los primeros 3 años, mientras que solo el 29% de los negocios liderados por mujeres cierra sus operaciones en el mismo periodo.
Lo anterior no pretende generalizar las habilidades empresariales por género, sino hacernos reflexionar qué factores favorecen la sostenibilidad en las empresas y qué fortalezas femeninas se deben potenciar.
Hay tres puntos clave que se deben tener en cuenta para montar empresas que perduren y que son innatos al género femenino:
- Cautela: Analizar cuidadosamente todos los ángulos y escenarios es una habilidad femenina muy útil para definir cuál será el giro del negocio, tomando en cuenta experiencias previas, intereses y disponibilidad de recursos. El tiempo dedicado a este análisis facilita lanzarse con mayor capacidad de gestión, motivación y convicción.
- Actitud de aprendizaje: No es necesario saber todo, pero sí tener deseo de saber más. Actualmente el conocimiento está al alcance de todos, ya sean conocimientos técnicos o habilidades para gestionar el negocio, las opciones son múltiples.
- Compromiso: Una empresa exitosa es una responsabilidad de largo plazo, nada se construye de la noche a la mañana. La nueva empresa requerirá tiempo y dedicación.
Recuerda que a pesar de las dificultades que se presenten, se puede mantener la motivación planteando una visión a largo plazo que encause estrategias y acciones.